GRITOS DE LA MODA

Nunca me corto el pelo antes de rendir. No por cábala, sino por falta de tiempo.
Los momentos pre-examen son momentos de postergación, de dejar para mañana, pasado o para el mes que viene todo lo que puedo y tengo que hacer hoy.
Así que después de ese sábado hermoso en que me saqué de encima los libros de Cirugía, tuve que ponerme al día con miles de cosas que tenía pendientes.
Primero recuperar unas cuantas horas de sueño. Después algunas películas, algo de vida social y familiar, la limpieza profunda de la pieza (no más trapitos por encima ni la ropa en la silla) y el sábado, por fin, mi merecido corte de pelo.
No quería nada del otro mundo. En realidad, no tenía muy claro lo que quería (nota mental: no volver a ir a la peluquería sin saber cómo espero que salga mi cabeza), pero sabía algunas cosas que definitivamente no quería. Así que después de informarle al peluquero mi lista de No's le dije "bueno, ahora cortame dentro esas condiciones".
Me cortó, divino, hermoso. Venía todo bárbaro hasta que me mira, mira el espejo, me vuelve a mirar y dice:

Peluquero: ¿Nunca usaste flequillo?
Yo: Si, hace un tiempo, pero lo dejé crecer.
Peluquero: No, pero te digo un buen flequillo... te lo tendrías que hacer, te va a destacar los ojos.
Yo: ¡Ahhhh! Vos decís como me cortaba mi mamá cuando era chiquita, mi trauma de la primaria. Una onda rolinga.
Peluquero: Vos dejame a mí, te voy a hacer lo que está de última moda en Europa... algo para que cuando tu novio te vea saque los colmillos.

Y yo, que había rendido Cirugía, había terminado de leer un par de libros, había empezado nuevas actividades, me había puesto a dieta y me sentía una mujer renovada, pensé... si es rápido y es gratis, why not?
Y lo dejé hacer.

Ahora siento que tengo cara de torta (por lo redonda, que se entienda) y que parezco de 15 años. De todas maneras, el cambio me resultó divertido.
Cuando volví a mi casa mi hermano me dice "estás igual a una foto vieja tuya que hay por ahí", ya lo sabía.
Por ahora todos dijeron "te queda bárbaro", "me encanta", "estás re linda" y cosas por el estilo... pero solamente sabré la verdad cuando esto crezca un poco y les pregunte a esas mismas personas si me lo vuelvo a cortar (para terminar haciendo lo que se me ocurra, por supuesto).
Lo veremos en el próximo capítulo...